El concierto por excelencia de la temporada de verano, que se extenderá hasta el 1º de marzo, reactiva el turismo y la gastronomía en una región que ya funciona con normalidad.
El funcionamiento turístico se refuerza en la región de Valparaíso y Viña del Mar gracias al festival musical más famoso de Latinoamérica, el concierto por excelencia de la temporada de verano, que hasta el 1º de marzo convoca a reconocidos artistas.
Este año el cierre estará a cargo de Mateo Palacios Corazzina, más conocido como Trueno, un cantante argentino de 21 años que fue confirmado luego de que el mexicano Peso Pluma cancelara todas sus presentaciones en Latinoamérica.
Desde el gobierno central manifestaron que el funcionamiento hotelero y gastronómico está llevando a cabo sus tareas con normalidad, tras los incendios que afectaron a la Región de Valparaíso. Además, sostuvieron que el festival emplea a más de 4.500 personas de manera directa y a otros servicios de forma indirecta.
La zona afectada por el fuego ya está controlada y posterior a las tareas de remoción comienza una de las reconstrucciones más grandes en la historia chilena, que demandará más de mil millones de dólares.
“Este año el festival tendrá un corte solidario, como gobierno estamos acompañando a los damnificados”, declaró la subsecretaria de Turismo en Chile, Verónica Pardo Lagos, quien a su vez hizo principal foco en sostener las fuentes de trabajo que se generan en torno al reconocido certamen internacional.
Poco antes de comenzar el festival, el jurado del evento —integrado por Young Cister, María Becerra, Ale Sergi, Manuel Turizo, Constanza Santa María, Priscilla Vargas, Bebe Contepomi y Alejandro Chávez— decidió subrayar el carácter solidario del encuentro.
Ale Sergi, cantante de Miranda, aseguró que “el mayor aporte que podemos hacer es estar presentes en este festival” y agregó que “ha sido una excelente idea llevarlo a cabo. Genera empleo para mucha gente y también impulsa el turismo. Esta actividad va a contribuir a la recuperación”.
La gastronomía, playas y vinos imperdibles son algunas de las experiencias para disfrutar en esta Región. Junto con Viña del Mar, Concón está preparada para recibir a los visitantes por su encanto costero.
En Valparaíso, los cerros Alegre y Concepción siguen siendo verdaderos testigos de la historia de la ciudad puerto. Su icónica arquitectura, declarada patrimonio internacional por la Unesco, asegura un recuerdo de ensueño.
Finalmente, en la ruta que une la región con Santiago, los viñedos en el valle de Casablanca garantizan una experiencia imperdible. Conocido por sus excelentes vinos blancos y espumantes, este tiene las puertas abiertas para deleitar a los amantes de la enología. Sus bodegas están en pleno funcionamiento para que los turistas puedan adentrarse en la historia vitivinícola de la zona.