El gremio estima un aumento de 5% en los viajes internos respecto al verano anterior. La mayor afluencia a destinos naturales también genera preocupación por el impacto en la fauna silvestre.
La temporada estival 2025-2026 se perfila como una de las más activas para el turismo en Chile. Según proyecciones de la Federación de Empresas de Turismo de Chile (Fedetur), se esperan más de 29 millones de viajes internos con fines recreativos, lo que representa un alza del 5% respecto al verano anterior. A ello se suman cerca de 2,75 millones de turistas extranjeros, con un incremento proyectado de 2,9%.
“Estas cifras son una excelente noticia para la industria, pero también conllevan desafíos que no podemos ignorar”, afirmó la presidenta ejecutiva de Fedetur, Mónica Zalaquett, quien advirtió sobre los riesgos que el aumento del turismo representa para los ecosistemas y la fauna silvestre. “Proteger la fauna es proteger nuestro principal activo turístico, pero también es una inversión en desarrollo local, empleo y sostenibilidad a largo plazo”, sostuvo.
Desde la Universidad San Sebastián (USS), especialistas de sus centros de rescate animal coincidieron en que el verano es la época de mayor exposición para la fauna debido al aumento de actividades al aire libre y la mayor probabilidad de contactos entre personas y animales silvestres.
El contacto humano con especies silvestres es más frecuente en primavera y verano, justo cuando muchas tienen crías, alertaron especialistas, que llamaron a fomentar prácticas responsables entre los turistas, como no dejar basura, no liberar mascotas y conocer la biodiversidad del lugar que se visita.
Zalaquett recalcó que existe una responsabilidad compartida entre el Estado, la industria y los visitantes. “Chile no puede aspirar a consolidarse como un destino de naturaleza de clase mundial sin una institucionalidad ambiental moderna y eficaz. El turismo bien gestionado puede ser una herramienta de conservación”, afirmó.

