Con motivo de la COP30, el país lanzó oficialmente la Trilha Amazônia Atlântica, un recorrido de 468 kilómetros que se convierte en la ruta señalizada de trekking más extensa del continente.
El lanzamiento oficial de la Trilha Amazônica Atlântica se realizó en el pabellón “Conheça o Brasil” durante la COP30 en Belém. Esta inicitativa posiciona a la Amazonía como un destino estratégico para el turismo de naturaleza en Sudamérica. El sendero atraviesa 17 municipios del estado de Pará, conecta 13 áreas protegidas, entre ellas siete unidades de conservación y seis territorios quilombolas, y recorre bosques, manglares, campos naturales y comunidades tradicionales.
La propuesta invita a los visitantes a una inmersión profunda en la vida y costumbres de las comunidades ribereñas, pescadores artesanales, agricultores y artesanos que habitan el corredor biocultural. “La trilha pone en el centro a las comunidades: quienes producen artesanía, gastronomía típica o servicios turísticos ahora tendrán mayor visibilidad y oportunidades”, señaló Ana Carla Lopes, secretaria ejecutiva del Ministerio de Turismo.
Las autoridades destacan que el proyecto fue diseñado bajo criterios de conservación. “La trilha no desforesta, preserva. Es una forma de generar desarrollo empleando y capacitando a más personas, de manera sustentable”, agregó Lopes.
Desde el Instituto Chico Mendes de Conservación de la Biodiversidad (ICMBio), la directora subrogante Carla Guaitanele subrayó que se trata de “una política pública que integra conservación y desarrollo local, mostrando al mundo la riqueza ambiental, cultural y gastronómica de Brasil”.
Un recorrido diverso en plena Amazonía
El punto de partida es el centro histórico de Belém. El trayecto avanza por parques urbanos y áreas de selva hasta la Vila de Caraparu; continúa hacia Castanhal y cruza territorios quilombolas; sigue la histórica ruta Belém–Bragança hasta llegar a Capanema. Luego atraviesa Nova Olinda, los Campos Naturales Bragantinos y los municipios de Bragança, Augusto Corrêa y Viseu, en la frontera con Maranhão. El final ofrece una vista panorámica de la Amazonía desde el mirador de la Serra do Piriá.
El recorrido puede realizarse a pie, en bicicleta o a caballo. Para facilitar la experiencia, el gobierno lanzó la aplicación eTrilhas, que entrega mapas, recomendaciones de seguridad y datos de servicios turísticos a lo largo de la ruta.

