Un informe publicado por la IATA indica que sus compañías socias podrían alcanzar niveles de ingresos y de clientes récord el año que viene.
Qué lejos parece el tiempo en que el entonces CEO de la IATA, Alexandre de Juniac, pedía “de rodillas” la clemencia de los pasajeros para que postergaran sus viajes en lugar de pedir reembolsos. Era en julio de 2020 y en pocos años se pasó del total blackout del transporte aéreo a perspectivas que van a superar todos los niveles históricos. La Asociación Internacional de Transporte Aéreo acaba de informar que las aerolíneas ganarán US$ 36.600 millones en 2025.
Esta cifra fue avanzada por el actual CEO de la organización internacional, Willie Walsh, en un comunicado que precisa que “las aerolíneas aprovecharán la baja de los precios del petróleo manteniendo los factores de ocupación por encima del 83 %, controlando estrictamente los costes e invirtiendo en descarbonización”.
En paralelo al crecimiento de las ganancias, se espera un récord de pasajeros, con 5.200 millones de personas en 2025 (+ 6,7 % en comparación con este año 2024). Y para terminar de completar esta tanda de números vertiginosos, la IATA informó que sus miembros superarán por primera vez el billón de dólares, gracias a un crecimiento interanual de 4,4 %.
Willie Walsh agregó: “Un billón de dólares es mucho: casi el 1 % de la economía mundial. Pero al mismo tiempo, las aerolíneas soportan 940.000 millones de dólares en costos, por no mencionar intereses e impuestos, por lo que su margen de beneficio neto es de solo el 3,6 %”. Si se quiere trasladar esta relación a una escala más gráfica, se puede determinar que en 2025, las empresas aéreas ganarán US$ 7 por pasajero.
El mismo informe profundiza en su análisis del crecimiento del transporte aéreo e indica que “las aerolíneas emplearon en 2023 a 86,5 millones de personas y generaron 4,1 billones de dólares de impacto económico, lo que representa el 3,9 % del PIB mundial”.